Mi Huerto urbano

No hay nada mejor que poder comer tu propia fruta y verdura, creando con ella una agricultura sostenible:  sin intermediarios y directa, 100% ecológica, sin pesticidas ni productos químicos y así respetando la naturaleza al máximo.

Tener un Huerto Urbano es ahora una moda pero en mi familia siempre han tenido huerto así que ya he vivido con ello. Pero son modas positivas y buenas y ojalá esta llegue para quedarse.

Como ya sé de qué va el tema de los huertos, me encantó que SOLIS me enviara mi huerto urbano ADDICT SMILE, con todo lo necesario para crearlo y, además de obtener mis propios alimentos, poder ser responsable e implicada con el medio ambiente.

No sé si sabíais que la conocida marca de tomate frito Solís, promueve la iniciativa Solís Responsable, su compromiso con la nutrición, el cultivo local y el medio ambiente.

Los productos Solís son responsables con la nutrición: con un sabor 100% natural, al punto de sal, y sin conservantes ni potenciadores de sabor. Además, están concebidos para ayudar a llevar una dieta sana y equilibrada para toda la familia.

Solís da soporte a la agricultura y la economía local desde hace 50 años. Todos los tomates empleados para sus salsas se cultivan en la Vega del Guadiana, en Extremadura, una zona ideal por su climatología y las condiciones de la tierra. Los agricultores que trabajan en nuestro cultivos se han dedicado al tomate durante varias generaciones, aportando una gran experiencia y conocimiento en el cultivo de esta hortaliza.

Solís obtiene productos agrícolas de alta calidad mediante el uso de métodos y prácticas que respetan el medio ambiente y aseguran una agricultura más sostenible a largo plazo.

Desde este 2014, todos los tomates se cultivan bajo la Norma de Producción Integrada de la Comunidad de Extremadura y se ha obtenido el Certificado de Conformidad por parte de SAI GLOBAL, una prestigiosa empresa externa.