A finales del año pasado acudí a su glamourosa inauguración pero es en esta última ocasión que pude disfrutar de su sofisticado espacio, de su relajante atmósfera y su cuidada carta: entrantes «Pica Pepito» con tapas tradicionales pero preparadas muy originalmente, ensaladas en el apartado «el Huerto de Pepito», «Pepitos gourmets», carnes a la leña, hamburguesas y tártares. Sin olvidar sus postres caseros.
Por supuesto que tengo que empezar por la estrella de la casa, lo que podríamos llamar un bocadillo pepito «deluxe»:
En la foto veréis el PEPITO Dupont que probamos con solomillo de buey, pimiento del padrón, foie y setas al ajillo.
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El responsable del local define el espacio de PEPITO como «hyggeli», palabra danesa que se utiliza para designar aquellos lugares especiales que son acogedores, agradables y con un encanto especial. |
PEPITO consta de diferentes espacios elegantes, clásicos y decoración modernista y piezas de anticuarios europeos realmente únicas y valiosas (como por ejemplo unas lámparas antiguas, el papel pintado, un archivador…) y todos sus detalles muy cuidados, hasta la cubertería.
Tiene tiene una sala con una chimenea con reminiscencias victorianas y su barra de bar clásica es también una Coctelería.
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Ensalada con rúcula, tomates, piñones y mozzarella de búfala. |
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Alitas de pollo deshuesadas con su rica y suave salsa. |
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Crepes de pato y foie. mmm… |
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Momento dulce: Cinco texturas de chocolate, ¡buenísimas todas! |
¿Ya conocíais a PEPITO?
Un restaurante de moda que se atreve a llamarse como un bocadillo y además elevarlo a ser un plato de carta. Sin prisas, sin estrés. Es así el bocado perfecto.
Kisses and Smiles