Situado en el Eixample Esquerre, el restaurante “El Bar” no es un bar al uso. No os dejéis confundir por su nombre (por eso va entrecomillado) y revoluciona el concepto habitual transgrediendo preceptos.
Tiene su barra, claro, a dos posturas y sin excesivos taburetes. Y media docena de mesas de dimensiones generosas, sin mantel, en un entorno con decoración periodística de los 70. Más allá de la cocina semi-vista, una mesa para grupos completa la oferta del nivel calle, nivel que se refuerza con un primer piso y un salón privado con capacidad para 32 personas y la terraza.
“El Bar”
08015 Barcelona.
T. 93 426 03 82
Para nuestra visita, escogimos un mediodía y nos decantamos por un excelente y completo menú degustación marinado bajar el criterio y recomendaciones del sommelier Sergi.
Os dejo las fotos que hice y como ya sabéis #VERparaCREER #COMERparaCREER …
Nuestra ensaladilla rusa con ventresca de atún «El Bar»
Buñuelos de bacalao con salsa de pimiento agridulce «EL BAR»
Ravioli de gamba con salsa ponzu «El Bar»
Mejillones gallegos abiertos al momento en escabeche «El Bar»
Vieira con praliné de nuez de macadamia y gelatina de lima «El Bar»
Bacalao Skrei cocinado al vacío, parmentier de ajo negro y salicornia «El Bar»
Caneló de ternera y foie con trufa negra » El Bar»
Selección de quesos afinados (Nosotros tomamos: BRISQUETA DE LA GARROTXA, COMTÉ 24 MESES, LANGRES DE CHAMPAGNE, PECORINO DI FOSSA, MÜNSTER, STILTON)
Crema de chocolate con cardamomo y pistachos
Sobre Restaurante «EL BAR»
En «El Bar», la caña se tira y se marida, siempre; las bravas de toda la vida se sirven con zorza de Ourense, y el chicle no es una chuchería. “El Bar” es un lugar de trato cercano, precios razonables, y la comodidad y el servicio de un buen restaurante.
Al frente encontramos a Sergi Giménez -sommelier con experiencia en el restaurante Colibrí-, y al chef Brian Matic -procedente del restaurante Ohla-.
La carta
Pensada para compartir y con la posibilidad de optar por medias raciones, cambia cada temporada. Ofrece tapeo clásico y no tan clásico, platos “de resistencia”, y un espectacular carro de quesos.
Aperitivos tradicionales como las Barderillas o las olivas Bella di Cerignola y Kalamata; tapas clásicas con un plus, como las mencionadas bravas, las croquetas caseras de pollo y jamón, una tortilla hecha al momento con huevos de gallina campera e ingredientes estacionales, y no tan clásicas, como los raviolis crujientes de gamba con salsa ponzu, o las vieiras con praliné de nueces de Macadamia, panceta ibérica y gelatina de lima.
Para quienes las tapas se les quedan pequeñas, “El Bar” dispone de platos “de resistencia” como el arroz Acquerello o el canelón de ternera y foie. Y para terminar, una selección de quesos europeos, entre ellos un Comté reserva 18 meses, un pecorino cubierto de hollejo de uva Rosso Conero y una gorgonzola con D. O. P.
En el apartado de postres, el chef ha sacado de la chistera, por ejemplo, el Chicle, la Macedonia cocinada a la vainilla con sopa de naranja sanguina o la Mousse de yogur con gelatina de lima y dulce de leche.
Los vinos
Cerca de 90 referencias en una carta dinámica, de D.O.s españolas y del resto de Europa, con representación de bodegas singulares, por ejemplo Dagueneau y Marie-Noelle Ledru.
Vinos a copas: blancos, tintos, cava y dulces.
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¿Conocíais ya a «El Bar»? ¿Qué os parece?
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